El avance de los activos digitales ha llevado a la Agencia Tributaria a reforzar su control sobre las criptomonedas. Con la introducción del Modelo 721, se establece la obligación de informar sobre la tenencia de criptoactivos en el extranjero, similar a la declaración de bienes en el exterior a través del Modelo 720. Esta normativa busca garantizar la transparencia fiscal y evitar posibles fraudes relacionados con la posesión y uso de criptomonedas fuera del territorio nacional.
¿Qué es el Modelo 721?
El Modelo 721 es una nueva obligación informativa que deben presentar aquellas personas físicas y jurídicas que posean criptomonedas en plataformas extranjeras. Su objetivo principal es controlar la tenencia de activos digitales fuera del país y prevenir la evasión fiscal a través del uso de estas monedas virtuales. Al igual que ocurre con otros modelos informativos, este no implica el pago de impuestos en sí mismo, pero sí sirve para proporcionar a la Agencia Tributaria información detallada sobre la titularidad y ubicación de estos activos.
Este modelo se enmarca dentro del Plan de Control Tributario y Aduanero que el Ministerio de Hacienda ha impulsado en los últimos años para fortalecer la lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida en el ámbito digital. La introducción del Modelo 721 responde, además, a las directrices de la Unión Europea y organismos internacionales, que han instado a los países miembros a establecer medidas más rigurosas en materia de fiscalidad de criptoactivos.
¿Quiénes están obligados a presentarlo?
Deben presentar el Modelo 721 todas aquellas personas o entidades residentes en España que cumplan con las siguientes condiciones:
Tengan criptomonedas depositadas en exchanges o plataformas con sede fuera del territorio español. Estas plataformas pueden incluir tanto exchanges centralizados como billeteras digitales de custodia en terceros países.
El valor conjunto de estos activos supere los 50.000 euros al cierre del año fiscal. Este umbral es similar al establecido en el Modelo 720 para la declaración de bienes en el extranjero y se calcula en función del valor de mercado de las criptomonedas al 31 de diciembre del año correspondiente.
En caso de que en ejercicios posteriores el valor supere nuevamente este umbral o haya cambios significativos en la tenencia de criptoactivos, se deberá presentar la declaración actualizada. Esto significa que los contribuyentes deben llevar un control detallado de la evolución de sus inversiones en criptoactivos y estar atentos a la normativa vigente para evitar incumplimientos.
Cabe destacar que esta obligación no solo afecta a personas físicas, sino también a empresas y otras entidades jurídicas que posean criptomonedas en el extranjero. Además, aquellos que ostenten titularidad compartida o actúen como apoderados o beneficiarios de billeteras digitales en el exterior también podrían estar sujetos a esta obligación informativa.
¿Cuándo se presenta el Modelo 721?
El plazo de presentación del Modelo 721 coincide con la declaración del Modelo 720 y se realiza entre el 1 de enero y el 31 de marzo del año siguiente al que se informa. Es importante cumplir con esta fecha límite, ya que cualquier retraso en la presentación del modelo puede conllevar sanciones significativas.
Los contribuyentes deben asegurarse de recopilar toda la información necesaria con antelación, dado que la recopilación de datos sobre criptomonedas en plataformas extranjeras puede requerir tiempo y ciertos trámites adicionales. Las plataformas de intercambio de criptoactivos suelen facilitar informes de saldo a cierre de año, lo que puede ser de gran utilidad para cumplir con esta obligación.
¿Qué información debe incluirse en la declaración?
Los contribuyentes deberán detallar la siguiente información en el Modelo 721:
Identificación de la plataforma o exchange donde se encuentran los activos. Es crucial incluir el nombre completo de la entidad, su ubicación y cualquier información relevante que permita su identificación.
Relación de criptomonedas y su valor en euros al cierre del año fiscal. Esto implica convertir el saldo de los activos digitales a moneda fiat (euros) utilizando un tipo de cambio de referencia, generalmente el publicado por los principales exchanges o fuentes oficiales.
Clave pública de la wallet en la que se almacenan los activos, si aplica. En el caso de billeteras de autocustodia, es posible que se requiera detallar direcciones públicas asociadas a las criptomonedas declaradas.
Además de estos datos, la Agencia Tributaria puede requerir información adicional en función de la evolución de la normativa y las necesidades de control fiscal.
Consecuencias de no presentar el Modelo 721
La no presentación o la presentación incorrecta del Modelo 721 puede acarrear sanciones severas. Aunque la normativa aún se encuentra en proceso de consolidación, se espera que las multas sigan el esquema del Modelo 720, con sanciones económicas elevadas por incumplimiento o inexactitudes en la información proporcionada.
Las sanciones pueden oscilar entre una multa fija por cada dato omitido o incorrecto y un porcentaje sobre el valor total de los activos no declarados. En casos de incumplimientos graves, las multas podrían llegar a suponer un porcentaje significativo del saldo total de criptomonedas no declarado. Esto hace que sea fundamental para los contribuyentes asegurarse de presentar correctamente este modelo y contar con asesoramiento especializado si tienen dudas sobre su aplicación.